No hablamos inglés

Cuando llegan expatriados nuevos les digo que lo más importante para disfrutar de vivir en Manabí es aprender español. Para ellos es una habilidad de supervivencia - necesitan comunicarse y demostrar que se quieren adaptar.

Por otro lado, aprender inglés es una habilidad de supervivencia para los ecuatorianos. No lo necesitan para sobrevivir a diario, pero Ecuador necesita personas de habla inglesa para participar y competir en mercados y foros internacionales que formarán el futuro en un mundo globalizado.

No es una cuestión de política o de defensa de la cultura local. El mundo conectado necesita un idioma compartido, y los creadores de la red hablan inglés. Hoy estamos desarrollando  un inglés mundial, independiente de cualquier identidad nacional, para permitir que todas las personas se comuniquen en un idioma común.

Cuando los pilotos de las líneas aéreas hablan con los controladores aéreos, en cualquier parte del mundo, lo hacen en inglés. También los programadores informáticos. Cuando los Sauditas venden petróleo a los japoneses, las negociaciones y los contratos están en inglés. Lo mismo cuando Ecuador vende camarones a los chinos. Pero lo peor es que en foros y publicaciones científicas, en conferencias políticas y grupos de expertos, no se escucha la voz de Ecuador, porque carece de los angloparlantes calificados para representar sus opiniones y presentar sus contribuciones.

No es que los ecuatorianos no sean lo suficientemente inteligentes, ni educados, ni lo suficientemente capaces de contribuir, es simplemente que el nivel de dominio del inglés en Ecuador es abismal. English First (EF), un gigante mundial en la enseñanza del inglés, en su Clasificación Global de Dominio del Inglés coloca a Ecuador en el último lugar de los 19 países de América Latina, con una calificación de “Dominio Muy Bajo”.

La responsabilidad no recae en nuestros estudiantes, sino en las autoridades educativas nacionales que ignoran la importancia del dominio del inglés, aún usan metodología y materiales anticuados y no utilizan los recursos de Internet. La metodología moderna emplea letras de canciones, áreas de chat y medias sociales para retener el interés de los jóvenes.

La situación no es insoluble. El talento idiomático ecuatoriano se ve en los muchos ciudadanos hablando español, además de uno o más idiomas nativos.  Para el inglés, hay recursos humanos dentro y fuera del país. Hay material didáctico y metodología gratis en el internet.

Lo que se necesita es un compromiso serio por parte del gobierno y un consenso público sobre la importancia del inglés. Con empeño y buena planificación, dentro de unos años Ecuador podría estar cerca al tope de esa lista de dominio del inglés latinoamericano, con todos los beneficios y oportunidades que eso traerá.

We can't speak English

Cuando llegan expatriados nuevos les digo que lo más importante para disfrutar de vivir en Manabí es aprender español. Para ellos es una habilidad de supervivencia - necesitan comunicarse y demostrar que se quieren adaptar.

Por otro lado, aprender inglés es una habilidad de supervivencia para los ecuatorianos. No lo necesitan para sobrevivir a diario, pero Ecuador necesita personas de habla inglesa para participar y competir en mercados y foros internacionales que formarán el futuro en un mundo globalizado.

No es una cuestión de política o de defensa de la cultura local. El mundo conectado necesita un idioma compartido, y los creadores de la red hablan inglés. Hoy estamos desarrollando  un inglés mundial, independiente de cualquier identidad nacional, para permitir que todas las personas se comuniquen en un idioma común.

Cuando los pilotos de las líneas aéreas hablan con los controladores aéreos, en cualquier parte del mundo, es en inglés. También los programadores informáticos. Cuando los Sauditas venden petróleo a los japoneses, las negociaciones y los contratos están en inglés. Lo mismo cuando Ecuador vende camarones a los chinos. Pero lo peor es que en foros y publicaciones científicas, en conferencias políticas y grupos de expertos, no se escucha la voz de Ecuador, porque carece de los angloparlantes calificados para representar sus opiniones y presentar sus contribuciones.

No es que los ecuatorianos no sean lo suficientemente inteligentes, ni educados, ni lo suficientemente capaces de contribuir, es simplemente que el nivel de dominio del inglés en Ecuador es abismal. English First (EF), un gigante mundial en la enseñanza del inglés, en su Clasificación Global de Dominio del Inglés coloca a Ecuador en el último lugar de los 19 países de América Latina, con una calificación de “Dominio Muy Bajo”.

La responsabilidad no recae en nuestros estudiantes, sino en las autoridades educativas nacionales que ignoran la importancia del dominio del inglés, aún usan metodología y materiales anticuados y no utilizan los recursos de Internet y los hablantes nativos locales. La metodología moderna utiliza letras de canciones, áreas de chat y medias sociales para retener el interés de los jóvenes.

La situación no es insoluble. El talento idiomático ecuatoriano se ve en los muchos ciudadanos hablando español además de uno o más idiomas nativos.  Para el inglés, hay recursos humanos dentro y fuera del país. Hay material didáctico y metodología gratis en el internet.